Samsung sumó funciones a sus relojes inteligentes

Samsung Electronics anunció que ya están habilitadas en la Argentina las funciones de electrocardiograma (ECG) y control de la presión arterial en los relojes inteligentes Watch5 Pro, Watch5 y Watch4. Las dos características se suman a funciones que ya ofrece Samsung Health.

Samsung Electronics anunció que ya están habilitadas en la Argentina las funciones de electrocardiograma (ECG) y control de la presión arterial en los relojes inteligentes Watch5 Pro, Watch5 y Watch4. Las dos características se suman a funciones que ya ofrece Samsung Health, como la evolución de la masa corporal, la regulación del sueño, el control del oxígeno en la sangre y la disminución del estrés. Estas actualizaciones no son productos médicos, por lo tanto, ante cualquier duda es importante compartir la información provista con los médicos y profesionales de la salud.

La función de electrocardiograma registra la actividad eléctrica del corazón a través de un sensor en un Galaxy Watch compatible. La aplicación Samsung Health Monitor puede abrirse cuando el usuario está sentado y el reloj está bien ajustado a la muñeca. El antebrazo debe posarse sobre una superficie plana y la yema del dedo de la mano opuesta debe colocarse en el botón superior del reloj durante 30 segundos. La aplicación medirá la frecuencia y el ritmo cardíaco, que se clasificarán como ritmo sinusal (un latido cardíaco normal y normal) o AFib (cuando el corazón late de manera irregular). Estos datos pueden exportarse a un archivo PDF.

Para activar estas funciones, los usuarios tendrán que instalar la aplicación Samsung Health Monitor en su smartphone Samsung Galaxy con Android 7 o superior y conectarla a su Galaxy Watch compatible (Galaxy Watch5 Pro, Galaxy Watch5 y Galaxy Watch4). Realizado este paso tendrán que calibrar su presión arterial con un brazalete tradicional. A continuación, podrán tocar Medir en su dispositivo y acceder al estado de su presión arterial cuando quieran. El equipo trabaja a través del análisis de la onda del pulso, que se rastrea con los sensores de monitorización del ritmo cardíaco. A partir de esto, el programa registra la relación entre el valor de calibración y el cambio de presión arterial para determinar la presión de la misma. Para garantizar la precisión, es necesario calibrar el dispositivo al menos cada 28 días.

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